Queen: Deep Cuts Volume One (1973-1976), por Rhys Thomas
Queen nunca se propuso ser una banda de simples, lo cual es extraño teniendo en cuenta que la recopilación Greatest Hits es el álbum más vendido de todos los tiempos en el Reino Unido. Queen fue una banda de álbumes. Era recién cuando un álbum se completaba que escogían puntillosamente tres o cuatro canciones que, según pensaban, representaban lo mejor del álbum y podían resultar atractivas a las ondas de radio (o sea, las más comerciales) para usarlas en sencillos. Como resultado, hay muchas canciones fantásticas de Queen que nunca lograron llegar al público que merecen.
Este álbum Deep Cuts se ha demorado demasiado. Constituye una oportunidad para el oyente casual de escuchar algo de lo mejor de Queen; y algunas de estas canciones están realmente entre las mejores que Queen jamás registró. Así que olvídate del Queen amigable con la radio (deja eso de lado), abre tu mente y escucha al Queen REAL. No mirarás hacia atras.
Ogre Battle, de Queen II, es una descomunal explosión de lo que luego sería llamado 'thrash metal'. La canción tiene un potente riff tocado por Brian, pero fue de hecho fue concebido por Freddie en guitarra ya en 1970.
Stone Cold Crazy, de Sheer Heart Attack, contiene versos que Freddie interpretara con su banda Wreckage a fines de los años sesenta, pero la canción finalmente apareció, reformada con un nuevo riff de Brian, en el disco con los cuatro miembros de Queen compartiendo por primera vez los créditos de composición. El resultado es bastante fenomental: dos minutos de rock frenético, imparable, que simplemente no te deja tomar aliento. ¿La canción de Queen más pesada entre todas? Más tarde se convirtió en un éxito de Metallica, como doble cara A de Enter Sandman, ganador del Premio Grammy en 1992.
My Fairy King, por Freddie Mercury y del álbum Queen, es tan hermoso y poético que casi puede olerse el venado y degustarse el fluir de los ríos, llenos de un vino tan claro. Una canción asombrosa, y una de las más imaginativas de Freddie. Además, Freddie tomó su nuevo apellido 'Mercury' del verso "Oh Mother Mercury, what you have done to me?" ["Oh Madre Mercurio, ¿qué me has hecho?"]. Simplemente, 'Freddie Bulsara' no era lo suficientemente rock and roll. El tema también presenta el debut de los famosos alaridos de Roger.
I'm In Love With My Car, escrita y cantada por Roger Taylor, es probablemente la canción de amor menos convencional de Queen, ya que trata de un automóvil. Fue inspirada por John Harris, un asistente del grupo que estaba realmente enamorado de su coche. La canción, de A Night At The Opera, fue también la cara B de Bohemian Rhapsody, que -como todos sabemos- se mantuvo en el puesto número 1 del Reino Unido por 9 semanas.
Keep Yourself Alive, por Brian May y también del primer álbum de Queen, fue la primer canción escrita específicamente para Queen y el primer sencillo que la banda lanzó, hacia 1973. No entró en las listas, más que nada porque Radio One lo rechazó ¡con el pretexto de que tardaba demasiado en comenzar!
Long Away, extraída de A Day At The Races, fue compuesta por Brian May en su guitarra Burns de 12 cuerdas, un poco en el estilo de The Byrds. “Es realmente una canción pop -en verdad lo más cercano a una canción pop que jamás he escrito, probablemente- y una canción de escape” - ha dicho Brian.
The Millionaire Waltz es una de las canciones épicas y estrafalarias de Freddie Mercury extraídas de A Day At The Races y algo jamás intentado por Queen o ninguna otra banda de rock antes ni después: un vals en el estilo de Johan Strauss.
'39, de A Night At The Opera, es una canción folk de ciencia-ficción única, escrita por Brian May. Es la historia de un hombre que sale a buscar nuevos mundos en el espacio. Debido al efecto de dilatación del tiempo según la [Teoría De La] Relatividad General, mientras que él está viajando casi a la velocidad de la luz su percepción del tiempo es diferente a la de la gente en casa. Por lo que llega a la Tierra después de lo que cree que es un año, pero para la gente en la Tierra, han pasado cien años. ¿O no? ¡Ufff!
Tenement Funster es otra canción poco conocida, pero excelente, compuesta por Roger Taylor para el álbum Sheer Heart Attack. Es quizás semi-biográfica. El pelo de Roger podía ser considerado una desgracia, le gustaban los autos y hasta hacía poco él y Freddie habían estado compartiendo un departamento; ¡tal vez sus simples de rock and roll enfurecían a los vecinos al lado! Dave Grohl de los Foo Fighters cita ésta como su canción favorita de todos los tiempos.
Flick Of The Wrist, de Sheer Heart Attack, fue el primer tiro por elevación contra los representantes de Queen de entonces, los Hermanos Sheffield. En el momento de la grabación, tensiones se habían acumulando entre la banda y sus representantes. Se le pagaba a Queen solamente sesenta libras por semana (a dividir entre los cuatro), pese al hecho de que agotaban entradas de conciertos y habían tenido un sencillo exitoso en todo el mundo. "It’s a rip-off’ - baby you’ve been had - sacrifice your leisure days, let me squeeze you til you’ve dried” ["Es una estafa - te han engañado, cariño - sacrifica tus días de ocio, déjame exprimirte hasta que estés seco"] – grita la letra concisa y regañosa de Freddie.
Lily Of The Valley, compuesta por Freddie Mercury, nos lleva de vuelta hacia Rhye, y los mundos creados en Queen y Queen II. Al perder su trono el Rey de Rhye, una guerra sin fin se extiende por las tierras. Este es el capítulo de cierre de la historia y un adiós a las letras de Mercury basadas en la fantasía, ya que Sheer Heart Attack y los álbumes subsiguientes se fijaron más en la realidad.
Good Company, de A Night At The Opera, fue escrita por Brian May. Para el oído no entrenado, Good Company puede sonar como una cancioncilla sencilla: un ukulele, una trompeta, un trombón, un clarinete; una mini banda de jazz capturada mientras improvisaba. Seguramente fue una de las canciones más fáciles de grabar. ¿Verdad? ¡FALSO! Cada nota de trompeta, clarinete y trombón fue en realidad tocada por Brian en su guitarra Red Special, hecha por él mismo. Llevó semanas y semanas; un acto de amor.
The March Of The Black Queen es una de las canciones más complejas que Queen jamás grabó. Compuesta por Freddie Mercury para el álbum Queen II, esta canción fue en muchas formas el origen de mucho de lo que vendría después. Las armonías vocales y de guitarra, texturadas e intrincadas, y hasta la estructura del tema fueron todas precursoras de Bohemian Rhapsody. Una obra maestra en sí misma.
In The Lap Of The Gods …revisited es quizás el primer himno auténtico de Queen. Extraída de Sheer Heart Attack, es una canción muy personal escrita por Freddie, y cerraría cada espectáculo de Queen hasta que We Are The Champions tomó su lugar unos pocos años después. Un final adecuado para una asombrosa recopilación nueva de las pistas menos conocidas del Queen clásico.
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