“El ingrediente añadido en Day At The Races es esta sensación de libertad que realmente teníamos…”. - Brian May

El quinto álbum de estudio de Queen se grabó en Sarm East, The Manor y Wessex Studios, entre julio y noviembre de 1976. Fue el primero en ser autoproducido; los cuatro LPs anteriores fueron coproducidos con Roy Thomas Baker (y John Anthony en Queen), con ingeniería de sonido por Mike Stone. 

El álbum siguió a su predecesor A Night At The Opera tomando prestado su título de una película de los hermanos Marx. Como A Night At The Opera -que muchos consideran su álbum hermano-, A Day At The Races es un trabajo muy diverso, que explora todo tipo de estilos y géneros musicales; de las pesadas Tie Your Mother Down y a You And I de John. A lo largo de los años, se ha dicho muchas veces -principalmente por Brian y Roger- que la banda vio este álbum más o menos como una continuación del LP anterior. De hecho, tanto es así que incluso los dos podrían haberse lanzando simultáneamente. A Day At The Races encuentra a Queen durante un período altamente inventivo y motivado. Los cuatro integrantes escriben y crean a un ritmo vertiginoso y en cuatro meses producen varias de sus grabaciones más aclamadas, sus sencillos más queridos y -en la mente de muchos- uno de sus mejores y más completos álbumes. 

Somebody To Love de Freddie, una de las canciones de Queen más conocidas, se convertiría en el sencillo más importante del álbum. También estaba entre las composiciones favoritas de su autor, como recordaba ocasionalmente. Como Bohemian Rhapsody, Somebody To Love presenta pistas vocales en capas complejas, aunque esta vez basadas en un arreglo góspel; una combinación multipista de las voces de Freddie, Brian y Roger para lograr la impresión de un coro góspel de 100 voces. Es asombroso pensar que los colosales coros de esta grabación pudieron haberse producido a partir de sólo tres voces, pero así es. Los distintos miembros de la banda han declarado muchas veces a través de los años que es pura fortuna y buena suerte que las tres voces se fusionen tan maravillosamente para proporcionar una parte tan distintiva del sonido de Queen.

A Day At The Races fue lanzado el 10 de diciembre de 1976 y alcanzó el puesto número uno en el Reino Unido. En Estados Unidos, publicado una semana después, alcanzó el puesto número 5 en la lista de álbumes de Billboard y se convirtió en el primer álbum estadounidense de Queen en alcanzar el estatus de disco de oro y, posteriormente, de platino.